Emociones y Maternidad

     Hace algunas semanas llegué a una conclusión muy importante en mi vida y últimamente algunas veces que las leo pienso “estaría padrísimo escribir algo de esto en el grupo de lactancia” así que hoy es el día y se los comparto. 

Cuando mi embarazo empezó mis hormonas se apoderaron de mi cuerpo y ahora me pregunto, ¿de cuál mamá no? Mi esposo sólo escuchaba este consejo de otros papás: “ten mucha paciencia en el embarazo”… y luego empecé a escuchar comentarios así como que se pone peor la cosa cuando el bebé llega etc etc… Y entre tanto cambio pensé: ¿para qué la naturaleza nos pondrá estos cambios de humor y de sentimientos tanto en el embarazo como en la lactancia? Si la naturaleza es tan sabia que nos hace tener un instinto materno impresionante, hace que nuestro cuerpo produzca leche para que podamos alimentar a nuestro bebé dándole el tipo de leche que necesita según su crecimiento, nos enseña a entender y comunicarnos con él desde el vientre ¿por qué la naturaleza nos podría estos cambios que creemos están fuera de lugar? Y fue ahí donde la iluminación llegó: porque estamos creando a un ser humano, a un ser humano que va a sentir y que siente TODO lo que nosotros sentimos, si nos hacemos las fuertes y decimos “no pasa nada” o alejo a mi bebé para que no sienta lo que yo siento, o peor “me hago la que no siento nada” entonces eso le enseñamos a nuestro bebé, que cuando pasa algo “triste, preocupante, que me asusta, que me preocupa etc. hay que cerrar las emociones, hay que hacer “que no pasa nada” y no hay que dejarlas salir..…. Si por el contrario nos hacemos cargo de lo que sentimos y le explicamos a nuestros bebés: “mamá está triste por…..” o “mamá se asustó porque ………” entonces les enseñamos a nuestros bebes que hay sentimiento y emociones y que como tales se viven, es decir se lloran, se ríen, se platican se comparten etc. Y eso hace que en un futuro el niño que será adulto aprenda también a entender y vivir sus emociones, y cuando como seres humanos entendemos y vivimos nuestras emociones y sentimientos y nos hacemos cargo de ellas entonces fluyen, entonces sabemos cómo actuar y sólo hasta ese momento somos libres para seguir y para dejar lo que pasó atrás y vivir presente. 

Si estoy triste, asustada, preocupada, pasando por una situación difícil ¿tengo que dejar de amamantar a mi bebé para que no sienta lo que estoy sintiendo? ¡CLARO QUE NO! Al contrario, pégatelo y apapáchalo y enséñale y enséñate como un apapacho se siente tan bien cuando uno está pasando por estas cosas, y deja que tu cuerpo y su cuerpo fluyan, así es como las emociones fluyen, haciéndome cargo y entendiendo que esto que me pasa es normal y está bien que yo esté así, porque es lo que toca, porque toca estar triste si alguien cercano no está, porque toca estar asustada si me acaban de asaltar, porque si mamá no tiene trabajo y necesitamos dinero toca estar preocupado…. Así toca y así está bien, y el bebé lo entiende, porque está en su naturaleza, lo que pasa es que nos han enseñado “que la vida tiene que ser perfecta” y en esa burbuja no nos enseñaron que estaba bien sentir… ahora que estamos en el proceso de regresar a lo básico, las invito a que Viecente Romero Redondo regresen a lo básico también en este aspecto con sus bebés, dejándolos sentir y dejándose sentir. Así que chicas, les invito a compartir lo que “mamá está viviendo” con sus chiquitines, ¡ellos lo entienden todo! Compártanlo como mamás que explican y enseñan el mundo a sus bebés, así como les enseñan los colores, les enseñan a hablar, a caminar etc. Enséñenlos a sentir y disfrutar lo que sienten… Espero les haya gustado mi reflexión…. 

Las quiero mamis! 

Helen Zuloaga Psicóloga y psicoterapeuta…. Pero sobre todo futura mamá en entrenamiento